jueves, 8 de febrero de 2018

Segunda idea: Sepúlveda, tierra de artesanos



Las artes tradicionales se han visto reducidas a la práctica extinción, debido a la industrialización de los procesos productivos. Sin embargo, la creación tradicional de determinados productos, está ligado de forma intrínseca a la cultura y al acervo regional.

Los años, enseñaron a las gentes de cada zona, cómo usar los recursos disponibles en su área geográfica, para poder fabricar los enseres y utensilios que necesitaban en su día a día.

Crear talleres para la recuperación de esta artesanía, podría no sólo abrir un mercado de productos hechos a mano, de calidad y que respeten y sean muestra de las antiguas tradiciones, sino abrir un espacio para la formación y recuperación de la sabiduría tradicional local. 

Estos talleres, deberían estar relacionados con las corrientes de arte contemporáneo que se desarrollasen también en la zona, creando un punto de innovación y de investigación, que permita aunar o mezclar, tradición y modernidad

Los talleres, que podrían ser desarrollados en espacios públicos, generarían una base estable de puestos de trabajo, cuyo modelo de rentabilidad estaría basado en:
  • Formación: Tanto en descubrimiento para niños, como en formación para artistas y formación para adultos, (desde la perspectiva de ocio a la profesional). 
  • Venta de productos 
  • Museo vivo 

Por poner un ejemplo: Cestería

Significaría recuperar riveras para el cultivo de los materiales básicos y reforestar determinadas áreas, con las especies necesarias, que requiera la demanda de productos de cestería. (Modelo agregado de regeneración forestal que también puede crear puestos de trabajo y riqueza en la zona. Cualquier proyecto se ramifica y crea un tejido a su alrededor). 

El taller estaría acondicionado con los utensilios de trabajo necesarios y preparado para recibir alumnos de distinta tipología, a los que se formaría en el arte tradicional de la cestería. La producción del taller se vendería en un mercado tradicional permanente, acompañado de otros productos artesanos de la zona y el taller tendría jornadas abiertas de difusión.

Otras artes tradicionales: Fabricación de trillos, campanas, monturas, tintes vegetales, telares, hilado de la lana, cerámica, encuadernación, ....

De esta forma, se conseguiría poner en valor el patrimonio histórico y cultural de Sepúlveda, pudiendo con el tiempo, convertirse en un centro de formación a nivel nacional e internacional de las artes tradicionales.

En muchos casos, el inicio de un taller, deberá comenzar con un trabajo de investigación, que ubique la actividad en la historia de Castilla (por ejemplo la mesta para el hilado o los telares, el funcionamiento de gremios,...) y en particular Sepúlveda y permita su recuperación y puesta en marcha.

Expertos en distintas materias artesanas, verían en Sepúveda un punto de encuentro, una biblioteca del conocimiento de la tradición y el saber de antaño. Lo que atraería población, recursos y podría ayudar a desarrollar una economía sostenible en la zona.




3 comentarios:

  1. Aquí podría ser interesante intentar formar una escuela-taller o una casa de oficios, recuperando labores tradicionales que se están perdiendo, y que ayudaría en primer lugar a fomentar su recuperación, y en segundo la formación de gente joven, que puede ser la forma de atraer una parte de la población que se está perdiendo en el pueblo.
    Además, estas entidades dependen no sólo de las empresas promotoras, sino también del Ministerio de Empleo, que para iniciativas de este tipo es posible que si se encuentre su apoyo.

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  2. Os podéis inspirar en el taller de las tradiciones de Valdemanco

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  3. este modelo ya existe en Cabañas de Polendos

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